ILUSIÓN O REALIDAD Completo

¿Que cantidad de verdad, eres capaz de escuchar?… ¿Sin huir?

Me he dado cuenta, de lo complicado que es tratar de ser sincero en la comunicación con los humanos, incluso conmigo mismo.

Es fascinante la capacidad que tenemos, de evadir la realidad, de
escondernos en micro mundos creados por nosotros mismos a partir de la
ilusión; a partir también de ese conjunto de fantasías auto aceptadas,
para encerrarnos en la armadura de la auto negación; sin reconocer que
al final de la historia, nada en este mundo es lo que parece, absolutamente todo es una ilusión, y eso a lo que llamamos “Mundo Real“, no es otra cosa que un sofisma de distracción, diseñado por nosotros mismos para evadir la verdadera razón de la vida misma.

Por eso buscamos desde la inconsciencia todo tipo de respuestas, en
múltiples contextos, cuando al final resulta que ni siquiera somos de “carne y hueso” como creemos. Nos dejamos confundir por tantas patrañas, desde la religión hasta la ciencia,
cuando en verdad, todas la respuestas están en nuestro interior, allá
donde nadie más puede ver, allá donde habita lo que sí somos, lo que
ningún cirujano podrá encontrar jamás… como tampoco podrá encontrar, nuestras ideas, emociones y creencias.

Pero aunque todos pretendamos buscar la tan aclamada “Realidad“, ¿cuantos estamos preparados para aceptarla como es?, o es que después de todo ¿no somos más que otra marioneta sin destino?.

Un comienzo importante en esta tarde, podría ser, tratar de aceptar
que existe un mundo de la Ilusión, y otro de la Realidad. Reconocer que
tal vez nuestras vidas se desarrollan en el contexto de la Ilusión,
seguramente porque este es más cómodo, más amable, más aceptable.

También nos ayudaría aceptar, que no nos gusta la Realidad; qué las
cosas como son, generalmente no son como queremos; qué no queremos
perder nuestros juguetes, ni el mundo en el que vivimos, y que
construimos desde los Paradigmas que otros nos impusieron; y hoy por hoy
resultan ser la base de eso a lo que erróneamente  le llamamos vida,
con la cual pretendemos sentirnos satisfechos, pero que solo estamos
como hipnotizados; y porque finalmente abrir la “Caja de Pandora“,
es un proceso que requiere aceptar lo que nos duele, y renunciar a lo
que nos gusta, para finalmente darnos cuenta que lo que somos, tal vez
no es lo que creemos ser.